Las grandes obras de Dios quieren siempre pasar por nuestros pequeños “sí” a su llamada.

Joaquín y Miriam, en Cabra. 

La disponibilidad y el servicio de muchos hermanos nos ayudan a descubrir que el Señor nos sigue llamando e invitando a vivir el evangelio con alegría, gratitud y radicalidad.

Enhorabuena a Joaquín y Miriam Blanco por esta llamada y esta gracia del Señor. Desde hace unos días se encuentran, de misión, al servicio de la Casa de Convivencias de Cabra.

Un testimonio que nos edifica a todos y que nos ayuda a ver que Dios sigue llamando a poner la vida al servicio del Evangelio.

Hoy, es un día muy especial. Le pedimos a la Virgen María, la Inmaculada, que renueve en nosotros la llama de la fe y la disponibilidad para hacer siempre la voluntad de Dios.