Una pequeña reflexión sobre esta aplicación: Sabemos que este medio de comunicación siempre ha sido noticia, desde su aparición, su uso, el tipo de contenido que ofrece, las actualizaciones y las alianzas con empresas grandes como Facebook; WhatsApp siempre es tu tema de tendencia e incluso actualmente podemos hablar de que es una herramienta que puede generar una adicción para quien lo usa...
Estamos en una era en dónde predomina la impaciencia: se esperan respuestas y soluciones prácticamente inmediatas, creemos que Dios nos deja con dos palomitas azules en visto y que nunca responderá, sin embargo la fe, las cosas no funcionan así. Nuestra unión con Dios es de paciencia, de fe y esperanza. El uso de WhatsApp debería de llevarse a cabo como cuando elevamos una oración: espera… quizá la otra persona se está tomando un respiro… no todo es malo cuando estás esperando y eso debería de haber dejado en ti, la palabra de Dios.
Ten en cuenta que no siempre es posible contestaciones inmediatas, que cada cosa tiene su tiempo y su momento. Siempre debes esperar y dar una respuesta reflexionada y pensada, para ello siempre debes hacer una pausa y apelar al silencio, es importante saber que las mejores respuestas son las que se meditan y las que se reflexionan tal y como lo hace Dios con las respuestas que nos brinda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario